EL IMPERIO ROMANO EN LA ÓPERA
Introducción
Si buscamos en la Wikipedia podemos leer lo siguiente: El Imperio romano fue el periodo de la civilización romana caracterizado por una forma de gobierno autocrática. En su apogeo controló un territorio que abarcaba desde el océano Atlántico al oeste hasta las orillas del mar Caspio y Rojo al este, y desde el desierto del Sahara al sur hasta las orillas de los ríos Rin y Danubio y la frontera con Caledonia al norte. Debido a su extensión y duración, las instituciones y la cultura romana tuvieron una influencia profunda y duradera en el desarrollo del lenguaje, la religión, la arquitectura, la literatura y las leyes en el territorio que gobernaba. El Imperio romano duró desde el 27aC (cuando el senado concedió a Ocatvio Cesar el título de Augusto) hasta el 1453 dC, cuando Constantinopla cayó en poder de los otomanos.
De todos es conocida esta grandiosa influencia que tuvo, y también de la huella que dejó en nuestra civilización desde entonces hasta nuestros días. La historia de la Roma antigua, de los emperadores, guerreros, generales, de sus mujeres, de las intrigas, de las muertes, de los amores y luchas por el poder se han nutrido todas las artes, y como no podría ser de otra manera la música también. Por eso hoy hablaremos de la presencia del Imperio romano en la ópera.
El Imperio romano en la ópera
Ya sabemos que Roma ha sido escenario de óperas célebres, pero no habría pensado nunca que hubiera tal cantidad de ellas inspiradas en la época de la Roma imperial. Yo voy a citar algunas de las más populares, pero la presencia del Imperio romano en la ópera es bastante más superior a la lista que dejo a continuación.
Por razón de espacio, veremos fragmentos de trece óperas. Además hemos de citar: Mitridate, re del Ponto, Il sogno di Scipione y Lucio Silla de Mozart; Adriano in Siria de Antonio Caldara; Catone in Utica de Antonio Vivaldi; Giustino de Handel; Fausta de Donizetti; La Cleopatra de Domenico Cimarosa; Cleopatra de Massenet y Nerone de Mascagni entre muchas otras
Las doce elegidas como representativas del Imperio romano en la ópera son:
L’incoronazione di Poppea de Claudio Monteverdi (1642)
La ópera nos narra la relación adúltera entre el emperador Neron y Poppea, que se acabará casando con él, en su ambición de ser coronada emperatriz. El maravilloso dúo entre ambos no podía faltar.
Sonya Yoncheva, Poppea. Kate Lindsey, Nerone. Les Arts Florissants, William Christie. Pur ti miro, pur ti godo
Agrippina de G.F. Handel (1709)
Ahora entra en escena una madre, la de Nerón, que no fue un hijo cualquiera. La ópera narra la historia de Agrippina, madre de Nerón, quien estuvo implicada en el complot contra el emperador Claudio para entronizar a su hijo.
Joyce DiDonato, Tu ben degno.
Ottone in Villa de Antonio Vivaldi (1713)
En esta ópera, el libretista Lalli, hizo algunos cambios en los personajes históricos. El emperador Claudio se convirtió en otro emperador romano, Otón (Ottone), que ya había aparecido como protagonista en L’incoronazione di Poppea de Monteverdi (1642) y en Agrippina de Handel.
Giulio Cesare in Egitto de G.F. Handel (1724)
Nombrar a Julio César y Egipto es recordar los amores que tuvo con Cleopatra, y en medio de intrigas, muertes y venganzas es de lo que va la ópera.
La clemenza di Tito de W. A. Mozart (1791)
A Mozart las andanzas de los protagonistas del Imperio romano le inspiraron bastante, he elegido, por ser la mejor valorada de todas la ópera La clemenza di Tito que muestra la imagen de un gobernante recto pero clemente con su pueblo, incluso ante un intento de asesinato contra su persona preparado por Vitelia y llevado a cabo por Sexto, su amigo.
Michael Spyres (Tito).
La vestale de Gaspare Spontini (1807)
Cambiamos de siglo pero la presencia del Imperio romano en la ópera no decae. En ésta, veremos los amores y tragedias del general romano Licinio y su amada Julia, que en su ausencia se ha convertido en vestal, es decir en sacerdotisa de Vesta.
Montserrat Caballé (Julia). O nume tutelar.
Aureliano in Palmira de Gioachino Rossini (1813)
La ópera seria de Gioachino Rossini se centra alrededor de la rivalidad entre el emperador romano Aureliano y el príncipe Arsace de Persia sobre la bella Zenobia, reina de Palmira.
En el fragmento escogido, podemos oír un ejemplo del crescendo tan típico de Rossini
Licinio – Sergio Vitale, Publia – Raffaella Lupinacci, Aureliano – Michael Spyres, Zenobia – Jessica Pratt. Corri Augusto, Arsace è sciolto
Norma de Vincenzo Bellini (1831)
Esta ópera de Bellini es posiblemente una de las más populares del repertorio de «romanos», si se nos permite la licencia. El procónsul romano Pollione es el protagonista masculino, dividido entre su antiguo amor por Norma y el nuevo sentimiento romántico por Adalgisa, así que le daremos voz a este personaje.
Mario del Monaco. Meco all’altar di Venere
Attila de Giuseppe Verdi (1846)
También el gran Verdi se acercó a las vicisitudes de los romanos y sus pueblos invasores. En este caso los hunos, con Attila al frente. Uno de los momentos notables es el que vamos a escuchar entre Attila y Ezio, el general romano al servicio del emperador Valentiniano III. Ezio le pide que le deje Italia, puesto que Attila será dueño del mundo.
Roma de Jules Massenet (1912)
Llegamos al siglo XX, y veremos tres ejemplos del Imperio romano en la ópera del pasado siglo. El primer ejemplo es este de Roma de Massenet, ópera que fue la última que se estrenó en vida del compositor. Narra las tribulaciones de Fausta, hija de Fabius que ha permitido que se extinguiera el fuego sagrado del templo de Vesta, profanando así el santuario. Lentulus, su enamorado, tratará de persuadirla para que huya de la muerte. Ella afrontará su destino.
Rolando Villazón (Lentulus). Je vais la voir!
Nerone de Arrigo Boito (1924)
La obra es una serie de escenas de la Roma imperial en la época del emperador Nerón y representa las tensiones entre la religión imperial y el cristianismo, y acaba con el Gran incendio de Roma. Boito falleció en 1918 antes de terminar la obra.
Fragmento de la representación de la ópera en el Festival de Bregenz 2021.
La violación de Lucrecia de Benjamin Britten (1946)
Britten retoma el tema de la inocencia, como hiciera en Peter Grimes. Aquí se trata de la inocencia de Lucrecia, esposa de Collatinus, violada por el rey Tarquino, por el que sin embargo, se siente atraída.
Lucretia: Sarah Connolly
Tarquinius: Christopher Maltman
Bianca: Catherine Wyn-Rogers
Lucia: Mary Nelson
Junius: Leigh Melrose
Collatinus: Clive Bayley
Antony and Cleopatra de John Adams (2022)
Como podemos ver el Imperio romano en la ópera sigue presente hasta nuestros días con esta producción de John Adams que se estrenó el año pasado en San Francisco. Se basa en el drama homónimo de William Shakespeare.
Dejamos un breve fragmento de la producción del estreno con Gerald Finley y Amina Edris en los roles protagonistas.