VARIOS EJEMPLOS DE LA LUNA EN LA ÓPERA – DIVERSAS ARIAS Y COROS
Hoy hablaremos de la luna en la ópera. Este satélite terrestre ha inspirado todo tipo de obras de arte. La música no podía quedar al márgen y dentro de ella, la ópera tampoco. Así pues, vamos a ver varios ejemplos de la luna en la ópera. En algunos es la protagonista absoluta. En otros, pasa fugazmente, como en una de esas noches nubladas en las que sólo se percibe un ténue resplandor.
Hemos encontrado varios ejemplos de la luna en la ópera, pero animamos a quien nos lea a aportar otros, que seguro que los hay.
Si la luna, de por si ya tiene encanto, la luna en la ópera mucho más.
La luna en la ópera
Haydn le dedica una ópera entera a la luna
Empezamos por ella. Se trata de Il mondo della luna. Estrenada en 1777. Explica como Ecclitico, un falso astrónomo, trata de liberar a Clarice y Flaminia así como a su criada Lisetta de su sobreprotector padre Buonafede. Lo hace para que se puedan casar con los maridos que han elegido, Ecclitico, Ernesto y Cecco respectivamente. Ecclitico droga a Buonafede y lo lleva al jardín y le hace creer que está en la Luna. Una vez allí, Cecco aparece como el emperador de la Luna con Ernesto como sirviente. Las mujeres se unen a la acción con los hombres y cada pareja se promete el matrimonio antes de que Buonafede se dé cuenta de que está siendo engañado. Finalmente, en el último acto, las tres parejas se casan con el consentimiento de Buonafede.
Este mismo argumento lo musicó primero Baldassare Galuppi en 1750. Más tarde, hizo lo mismo Giovanni Paisiello en 1783.
Oigamos O luna lucente.
La luna en la ópera Lucia di Lammermoor
La primera vez que aparece en escena el personaje de Lucia es para contarnos un hecho que sucede en las noches de luna. Lucia está enamorada de Edgardo de Ravenswood y le cuenta a su confidente, algo que está vinculado a la familia de éste. Lucia y Alisa se ecuentran ante una fuente y Lucia explica que las aguas de la misma se tiñen de rojo las noches de luna. El motivo es que siglos atrás, un Ravenswood mató a su esposa que cayó en la fuente.
Aria: Regnava nel silenzio. Lucia: Lisette Oropesa
La luna en la ópera Falstaff
En esta ópera de Verdi, la segunda parte del último acto tiene lugar en un bosque. Todos disfrazados para poner en evidencia a Falstaff. Es una noche en que se ven hadas, elfos y espíritus varios. Nanetta, como Reina de las hadas canta esta aria: Erriam sotto la luna (Vaguemos bajo la luna). veremos a Adriana Kucerová como Nanetta. La dirección escénica es de Richard Jones y la musical de Vladimir Jurowski. Festival de Glyndebourne de 2009.
Puccini y la luna
Giacomo Puccini nombra varias veces a la luna en más de una de sus óperas. Nosotros vamos a ver tres ejemplos. El primero es de su ópera Le Villi. En la parte titulada L’Abbandono encontramos este coro: Come un giglio reciso. La traducción es la siguiente:
Como un lirio cortado
yace en su ataúd.
El candor de su rostro es un rayo de luna…
¡Oh virgen pura, descansa en paz!…
En Tosca, Puccini pone en boca de la protagonista una frase dedicada a la luna. Es en la escena en la que aparece ella por primera vez. Propone una cita a Cavaradossi, por la noche. Una noche de luna llena. Le dice:
Es luna llena
y el aroma de las flores, por la noche,
embriaga el corazón.
No estás contento?
Vamos a ver a Shirley Verrett como Tosca y a Luciano Pavarotti como Cavaradossi.
Sin embargo, entre todas las óperas de Puccini es en el primer acto de La Bohème donde encontramos una referencia a la luna como protagonista de un momento mágico. Es en el aria Che gelida manina. Están Rodolfo, Mimì y la luna.
Veamos a Rolando Villazón y a Anna Netrebko.
Dos grandes arias dedicadas a la luna en la ópera
Las últimas arias son las más emblemáticas del tema de la luna en la ópera. Una es el Aria o Canción a la luna de Rusalka de Dvorák. El título del aria es Mesicku na nebi hlubokem. Se encuentra en el acto I de la ópera. La veremos interpretada por Renée Fleming.
Y la última no puede ser otra que Casta diva de Norma de Bellini. Está en el acto I cuando la sacerdotisa Norma entra para cortar las ramas del árbol sagrado en una noche de luna llena. En ese momento, Norma insiste a los druidas que deben conservar la paz.
Joan Sutherland es Norma, una Norma excepcional añadimos.
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