Los Tudor en la ópera – Seis óperas con la dinastía Tudor

LOS TUDOR EN LA ÓPERA – SEIS ÓPERAS CON LA DINASTÍA TUDOR

 

Los Tudor en la ópera

 

Introducción

Las monarquías han dado siempre mucho juego en todas las vertientes artísticas que existen. La literatura, la pintura, el cine, la televisión y, como no, la música, estan llenas de alusiones a reyes, príncipes o princesas. Unos son imaginarios pero otros son muy reales, en el sentido de verídicos. Una de las casa o dinastías más populares, que más veces ha sido tratada desde que hizo su aparición es la llamada dinastía Tudor. En este enlace podemos ver sus orígenes y lo que hicieron cada uno de sus miembros más destacados, que basicamente son dos: Enrique VIII e Isabel I.

Elos serán los protagonistas de esta selección que llamamos los Tudor en la ópera.

 

Los Tudor en la ópera

Hemos seleccionado seis óperas en las que aparecen las figuras antes mencionadas y otras que tuvieron relación con ellas. Revisando las fechas, veremos que el tema de los Tudor en la ópera ha dado para más de un siglo de composiciones. Empezaremos por el ejemplo más antiguo hasta la más actual.

 

Elisabetta, regina d’Inghilterra de Gioachino Rossini (1815)

Aquí, como el título indica, aparece la figura de Isabel I (Elisabetta). La ópera no es fiel a la verdad histórica. Narra el amor de Isabel I de Inglaterra por Robert Dudley, conde de Leicester, su supuesta reacción cuando descubre que ese amor no es correspondido, cómo lo sentencia a muerte, su arrepentimiento y su decisión de no entregar su amor a otro hombre.

Veamos un fragmento con Lela Cuberli (Isabel I) Fellon, la pena avrai…del acto II. Torino 1985. Además intervienen: Norfolk: Rockwell BlakeMatilde: Daniela DessìEnrico: Adriana CicognaLeicester: Antonio SavastanoGuglielmo: Mario Bolognesi

 

 

Anna Bolena de Gaetano Donizetti (1830)

Esta ópera es la primera de lo que se ha dado en llamar la Trilogía Tudor. En ella la figura de Isabel I no aparece, pero sí su madre, Anna Bolena lo que sin duda acabará influyendo en la niña que un día se convertirá en una de las reinas más temibles de la historia de Inglaterra.

Vamos a recrearnos en el fantástico dúo entre Anna Bolena y Giovanna Seymour, que se ha convertido en la nueva amante del esposo de Anna, Enrique VIII.

Son las voces de Montserrat Caballé (Anna Bolena) y Shirley Verret (Giovanna Seymour) Dio che mi vedi…Sul suo capo aggravi un Dio…Va, infelice.

 

 

Maria Stuarda de Gaetano Donizetti (1835)

Realmente Donizetti es el principal culpable de la presencia de los Tudor en la ópera. La segunda de su trilogía se centra en la figura de Maria Stuarda, prima de Isabel I, y recluída por la reina. En medio está el amor por el conde de Leicester, nexo que une a las dos mujeres.

De esta ópera no podemos evitar poner la gran escena de la confrontación entre Maria e Isabel. Veamos a Joyce Di Donato (Maria) y Elza van den Heever (Isabel).

 

 

Roberto Devereux de Gaetano Donizetti (1837)

Esta es la última ópera que Donizetti dedicó a la dinastía Tudor. En ella una anciana Isabel I lo pone todo patas arriba por el amor al conde de Essex, Roberto Devereux, que está enamorado de otra mujer. Cuando la reina sospecha esta historia ve perfectamente normal condenarlo a muerte. La escena que veremos es del acto III, Roberto, en la Torre de Londres, espera que Sarah, su enamorada logre salvarlo.

Come uno spirto angelico con Gregory Kunde.

 

 

Henri VIII de Camille Saint-Saëns (1883)

La acción cubre el período de la vida de Enrique VIII cuando el rey intentaba divorciarse de la reina Catalina de Aragón para casarse con Ana Bolena , una medida rechazada por la Iglesia.
Veremos a Montserrat Caballé como Catalina de Aragón en el aria Je ne te reverrai jamais (acto IV).

 

 

Gloriana de Benjamin Britten (1953)

Este es el último ejemplo de los Tudor en la ópera. Gloriana era el nombre dado por el poeta del siglo XVI, Edmund Spenser, al personaje que representa a la reina Isabel I en su poema, The Faerie Queene. Se convirtió en un nombre popular para la reina Isabel. Está documentado que las tropas en Tilbury la saludaron con gritos de «Gloriana, Gloriana, Gloriana», después de la derrota de la Armada Invencible, en 1588.
Es una ópera en tres actos con música de Benjamin Britten y libreto en inglés de William Plomer, que a su vez estaba basado en Elizabeth and Essex por Lytton Strachey.

Veremos un breve fragmento, Long may she keep this realm con Josephine Barstow como Isabel I.

 

 

Una curiosidad

Posiblemente a alguien le suene el título de Sueño de una noche de verano de Ambroise Thomas. Si alguien no ha oído hablar de esta ópera es normal, no he podido encontrar ni un documento sonoro de la misma, o sea que muy popular no debe ser. Sin embargo, en esta ópera está presente el personaje de la reina Isabel I. Con ella, y como personajes, encontramos al mismo William Shakespeare y a Falstaff. Seguiremos buscando algún fragmento. Esta ópera se estrenó en París en 1850, cuando ya se conocía la Trilogía Tudor de Donizetti.

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