EL ESPEJO EN LA ÓPERA – TRES PROTAGONISTAS SE MIRAN EN EL ESPEJO
Todos recordaremos esa frase de Espejito, espejito dime quien es la más hermosa…que pronunciaba la madrastra de Blancanieves en el cuento infantil, verdad?, pues en la ópera también tenemos escenas con espejo. Lo cierto es que podríamos encontrar escenas en muchas óperas con los objetos más diversos, los mismos que podemos tener en nuestras casas. Por eso el espejo en la ópera no es dificil de encontrar. Da igual si hablamos de hombres o mujeres, en todas las casas hay uno.
Hoy vamos a ver a tres mujeres mirándose al espejo. Pertenecen a tres óperas bien distintas. Vamos a ver la importancia del espejo en la ópera en estas escenas.
El espejo en la ópera – Tres escenas
Como siempre vamos a clasificarlas según la fecha de estreno de la ópera a la que pertenecen.
La traviata
El espejo en la ópera La traviata (1853) de Giuseppe Verdi, aparece en el último acto. Violetta está en su casa de París, con la única compañía de su fiel Annina y las esporádicas visitas del buen doctor Grenville.
Relee por enésima vez la carta que le mandó Giorgio Germont, el padre de Alfredo. Le promete una visita. Sin embargo, Violetta siente que la vida se le escapa por minutos y teme que esa visita se produzca cuando ya sea demasiado tarde. Después del recitativo Teneste la promessa y antes de la famosa aria Addio del passato, Violetta se mirará, casi sin querer, en el espejo y verá los estragos que ha hecho la enfermedad en ella (Come son mutata!, Cómo he cambiado!)
Vamos a ver a Marie McLaughlin como Violetta. Es una producción del Festival de Glyndebourne de 1988.
Faust
Esta ópera de Charles Gounod se estrenó en París en 1859. Aquí veremos una de las escenas más emblemáticas del espejo en la ópera. En esta ocasión es el diablo quien lo va a dejar para que Marguerite lo encuentre junto a un montón de joyas que realmente enloquecen a la joven.
Marguerite, que ha quedado impresionada por su anterior encuentro con Faust, encontrará las joyas y, naturalmente se las prueba. Queda cautivada por como realzan su belleza y cantará la Canción de las joyas (Ah! je ris de me voir si belle en ce miroir/¡Ah! Me río de verme tan bella en este espejo).Vamos a ver a Angela Gheorghiu.
Thaïs
Esta ópera de Massenet, Thaïs, estrenada en en París en 1894, tiene un aria que no puede ser más representativa del espejo en la ópera. Se trata de Dis-moi que je suis belle. Se encuentra en el acto II. Thaïs, cortesana de Alejandría, famosa por su belleza y su vida disoluta, se encuentra ante su tocador. Observa los primeros signos de vejez en su rostro pero invoca a Venus para conservar su belleza.
Vamos a ver a Renée Fleming, una de las protagonistas de Thaïs más notables de los últimos tiempos.
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