LO MEJOR DE WAGNER. DIEZ FRAGMENTOS ESCOGIDOS DE SU OBRA
Introducción
En el título que encabeza este artículo debería poner Lo mejor de Wagner para mí. Porque hoy os voy a hablar de mi Wagner preferido. Seguramente cada uno tendrá su top ten de la música de don Ricardo, pero seguro que el de esta lista lo compartirán muchos de sus seguidores. Sin embargo es muy osado hacer un «lo mejor de Wagner«, porque aunque sólo escribiera trece óperas en ellas hay tal cantidad de música, que se podrían encontrar cien momentos memorables y aún no la habríamos agotado. En esta selección hay fragmentos que fueron los primeros que me hicieron acercar a la música de Wagner y otros que descubrí más adelante.
Espero que todo el mundo disfrute de esta gran música.
Lo mejor de Wagner
Los fragmentos escogidos aparecerán por orden de antiguedad de la ópera a la que pertenecen.
Rienzi – Allmächt’ger Vater (Plegaria de Rienzi)
Esta ópera fue la tercera de Richard Wagner, y la primera en alcanzar algo más de popularidad que las dos anteriores. En ella Wagner aún no era lo que él quería llegar a ser, pero iba en camino. Lo vemos en la Obertura y en el aria que vamos a oir. Esta ópera no se representa nunca en el Festival de Bayreuth porque se considera que su caracter y temática se alejan de lo que es la obra de Wagner.
Vamos a escuchar a Jonas Kaufmann con la Orchester der Deutschen Oper Berlin · Donald Runnicles
Tannhäuser – Coro de peregrinos (Beglückt darf nun dich)
En la quinta ópera de Richard Wagner, Tannhäuser, hay muchísimos fragmentos extraordinarios, sin embargo este coro fue lo primero que recuerdo haber oído de Wagner en un disco que había en mi casa. Así que en mi lista tenía que estar. El coro representa a un grupo de peregrinos que regresan de Roma tras haber conseguido el perdón por sus pecados. Elisabeth, no ve entre ellos a su amado Tannhäuser y se retirará con tristeza.
Coros y Orquesta de la Opera de Viena con George Solti al frente. 1971
Lohengrin – Obertura
Una de las Oberturas de Wagner, y tiene bastantes de memorables, que cada vez que la escucho me quedo con la boca abierta. Es uno de los crescendos y diminuendos más fantásticos que se han escrito. La orquesta que empieza casi con un susurro de los violines, va creciendo y creciendo hasta que todos los instrumentos entran en juego, para irse apagando progresivamente.
Claudio Abbado dirige esta Obertura. Orquesta de Lucerna
Tristán e Isolda – Liebestod (Muerte de Isolda)
Ya hemos pasado el ecuador de las óperas de Wagner y llegamos a la séptima. Tristán e Isolda, esa monumental historia de amor con una música que te clava en la butaca, y te arrastra con la marea de sentimientos que inspira. La muerte de Isolda la hemos escuchado montones de veces, pero es imposible no ponerla en una selección de los momentos más inspirados de Wagner, así que ahí va. La vamos a ver interpretada por Waltraud Meier. Es una producción de Bayreuth de 1995. Dirige Daniel Barenboim. El Liebestod empieza en el minuto 7:30.
Los Maestros cantores de Nuremberg – Preludio Acto I
La octava ópera de Wagner es Los Maestros Cantores. Es una ópera festiva y cómica. Wagner la escribió en respuesta a muchas críticas que le acusaban de no saber escribir una música más popular y asequible a todos. No sólo la escribió sino que además es la más larga de todas las suyas. Es un poco aquello de que si no quieres caldo, dos tazas, pero a lo wagneriano.
Oigamos el Preludio del acto I con la Orquesta Sinfónica de Chicago dirigida por sir Georg Solti.
El oro del Rin – Preludio Acto I
Ahora entramos en lo que podría ser una segunda parte de lo mejor de Wagner porque las cinco piezas restantes que nos quedan pertenecen a la tetralogía El Anillo del Nibelungo.
La primera es el fantástico Preludio del acto I. Es el Wagner genial que hace crecer el Rin sin modulacíon alguna y lo llega a invadir todo.
Heinz Rögner & Rundfunk-Sinfonieorchester Berlin.
El oro del Rin – Entrada de los dioses al Valhalla
Así termina este Prólogo del Anillo. Con esta monumental escena de la llegada de los dioses al Valhalla.
Metropolitan Opera (James Levine). James Morris, Siegfried Jerusalem, Alan Held, Mark Baker, Ekkehard Wlaschiha, Heinz Zednik, Jan-Hendrik Rootering, Matti Salminen.
La Walquiria – Winterstürme wichen
No todo se reduce a la cabalgata de las Walquirias en esta segunda ópera del Anillo, ni muchísimo menos. Hay gran cantidad de momentos memorables. Este dúo que cantan los personajes de Siegmund y Sieglinde en el acto I, señala la llegada de la primavera y demuestra el amor que une a los dos hermanos.
Jeannine Altmeyer es Sieglinde, Peter Hofmann es Siegmund. Dirigida por Pierre Boulez. Director de escena: Patrice Chéreau. Bayreuth 1980.
El ocaso de los dioses – Viaje de Sigfrido por el Rin
Lo mejor de Wagner se cerrará con dos fragmentos de la última parte de la Tetralogía del Anillo, El ocaso de los dioses. Esta gran obra maestra de la música del romanticismo le supuso a Wagner emplear más de un cuarto de siglo en escribirla. Su cualidad más obvia, para alguien que la escuche por primera vez, es su extensa longitud: una representación entera del ciclo se extiende durante cuatro noches de ópera, con un tiempo total de quince horas, dependiendo de la velocidad que el director imprima a la ejecución de la partitura.
El viaje de Sigfrido por el Rin es un importante pasaje orquestal que describe el viaje del héroe con su caballo Grane por el Rin buscando aventuras.
Veamos a la London Philharmonic dirigida por Klaus Tennstedt.
El ocaso de los dioses – La inmolación de Brunhilde
Al final, Brunhilde está decidida a expiar con su propia vida los crímenes que se han ido produciendo por el Anillo. Ordena que se prepare una pira y ella, a lomos del caballo de Sigfrido, Grane, se lanza a la hoguera lanzando el anillo a las Hijas del Rin para que lo recuperen. Con esto, se hundirá el palacio celestial del Valhalla. Una nueva era va a empezar.
Anne Evans es Brunhilde. Orquesta y Coro del Festival de Bayreuth, Daniel Barenboim. 1992