Gilda, personaje de Rigoletto – Personajes de ópera

GILDA, PERSONAJE DE RIGOLETTO – PERSONAJES DE ÓPERA

 

Gilda

 

Hoy hablaremos de este personaje femenino de Rigoletto y podremos escuchar algunos de los momentos en los que interviene en la ópera de Verdi.

 

Gilda, personaje de Rigoletto

De la protagonista femenina de esta ópera se han dicho muchas cosas. Una de las más oídas es que es un poco «pava». Es decir, algo tontorrona y cursi. Personalmente creo que no es así. Vamos a imaginarnos a Gilda.

La hija de Rigoletto es una jovencita, así que muchos de sus «pecados» son atribuibles a su juventud e inexperiencia. Ha llegado a la casa de su padre hace poco y éste la tiene sometida a una clausura casi total. No se le permite salir si no es para ir a la iglesia. Está siempre acompañada por la criada Giovanna. Vive en una ciudad de la que no ha visto más calles que las que la llevan al templo los días de fiesta. Yo me aventuraría a decir que Gilda se aburría solemnemente. Ya sabemos que el aburrimiento es mala compañía a cualquier edad, pero en la juventud puede ser hasta peligroso.

Gilda es inocente y pura

Esto nos lo dice la música de Verdi. Las primeras intervenciones del personaje de hoy están siempre acompañadas por la flauta, que indica inocencia. Ha conocido a un joven en la iglesia, naturalmente, y se ha fijado en él. El joven en cuestión, ya sabemos que no es otro que el duque de Mantua. Éste lo que quiere es añadir un nuevo nombre a su lista de conquistas y se las apaña para acercarse a la joven con la inestimable y retribuída ayuda de Giovanna. Se presenta como Gualtier Maldè, estudiante y pobre. Gilda caerá en sus redes y se enamorará de verdad.

Caro nome es la declaración de amor de Gilda. Oigámosla en la voz de Diana Damrau.

 

 

Gilda es mentirosa

Cuando su padre le pregunta si alguien la sigue cuando va a la iglesia, responde que nunca. Esta mentira le genera remordimientos y eso le dice a Giovanna. Ésta, en otras palabras, le viene a decir que no hace falta que le diga nada a su padre, a no ser que odie al joven. Evidentemente no lo odia y así lo dice. Minutos después hará su entrada el duque y tendrán su primera escena de amor.

Veremos a Edita Gruberova y a Luciano Pavarotti. Giovanna es la mezzosoprano Fedora Barbieri.

 

 

Gilda se sincera al final

 

Cuando se lo confesará todo a su padre ya será después de que el duque se haya aprovechado de ella. Es el emotivo dúo del acto II. Tutte le feste al tempio. Aquí si que dice la verdad, lo que provocará que afloren la ira y sed de venganza de Rigoletto. A pesar de todo, Gilda insiste en que lo perdone.

 

Gilda es desobediente

En el último acto, Rigoletto lleva a su hija hasta el hostal de Sparafucile. Allí va el duque de Mantua para encontrarse con Maddalena, la hermana de Sparafucile. Rigoletto quiere que su hija vea cuales son las costumbres del hombre al que dice que ama todavía. Rigoletto ha pactado con Sparafucile el asesinato del duque. Tras la escena con Maddalena vista por Gilda, su padre la manda a casa, le dice que se vista de hombre y vaya a Verona donde se reunirán al día siguiente.

Maddalena ha acompañado al duque a su habitación. Intentará que su hermano no lleve a cabo el asesinato, que mate a Rigoletto. Pero hasta los delincuentes tienen su código de honor, y se niega. Al final pactan que matarán al primer viajero que llegue a la casa. Hay una tormenta y alguien pedirá cobijo. Estas palabras son las que oirá Gilda, que ha desobedecido a su padre y ha regresado al hostal.

 

Gilda está enamorada

Por ese motivo será la víctima. Ella llamará a la puerta del hostal y salvará la vida a su amado, que naturalmente no sospecha nada de todo eso.

Con esta tragedia terminará la ópera. La venganza de Rigoletto se ha vuelto contra él, como una maldición.

Todas estas características de Gilda son las que veremos en los actos II y III. Veremos la confesión dolorosa que le hace a su padre, veremos como desobedece y como se entrega a la muerte por amor.

Veremos la grabación del Teatro Regio de Parma de 2008 con

Rigoletto: Leo Nucci

Duca di Mantova: Francesco Demuro

Gilda: Nino Machaidze

Sparafucile: Marco Spotti

Maddalena: Stefanie Irányi

 

 

 

 

 

 

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