Idomeneo que sufre los embates de una tremenda tempestad hace una promesa al dios Neptuno: si salva a su tripulación le ofrecerá en sacrificio la vida de la primera persona que vea al llegar a la playa. Su horror no tiene límites al reconocer en esa persona a su propio hijo, Idamante. Éste, ignorante de la promesa hecha por su padre, no se explica la frialdad con que Idomeneo le recibe.
En esta producción de la Bayerische Staatsoper el papel de Idamente lo interpreta el tenor Pavol Breslik e Idomeneo es John Mark Ainsley.
IDOMENEO
Vedrommi intorno
L’ombra dolente,
Che notte e giorno:
Sono innocente
M’accennerà.
Nel sen trafitto
Nel corpo esangue
Il mio delitto,
Lo sparso sangue
M’additerà.
Qual spavento,
Qual dolore!
Di tormento
Questo core
Quante volte morirà!
(Vede un uomo che s’avvicina)
Recitativo
IDOMENEO
Cieli! che veggo? Ecco, la sventurata
vittima, ahimè! s’appressa… e queste
mani le ministre saran? … mani
esecrande! Barbari, ingiusti Numi!
are nefande!
Scena 10
Recitativo
IDAMANTE
Spiagge romite, e voi, scoscese rupi
testimoni al mio duol siate, e cortesi
di questo vostro albergo a un agitato
cor … quanto spiegate di mia sorte il
rigor solinghi orrori!… Vedo fra quelli
avanzi di fracassate navi su quel lido
sconosciuto guerrier… voglio ascoltarlo,
vuo’ confortarlo, e voglio in letizia
cangiar, quel suo cordoglio.
(S’appressa e parla ad Idomeneo)
Sgombra, oh guerrier, qual tu ti sia,
il timore; eccoti pronto a tuo soccorso
quello, che in questo clima offrir te’l può.
IDOMENEO
(Da sè)
Più il guardo,
più mi strugge il dolor.
(Ad Idamante)
De’ giorni miei il resto a te dovrò,
tu quale avrai premio da me?
IDAMANTE
Premio al mio cor sarà l’esser pago
d’averti sollevato, difeso: ahi troppo,
amico, dalle miserie mie instrutto
io fui a intenerirmi alle miserie altrui.
IDOMENEO
(Da sè)
Qual voce,
qual pietà il mio sen trafigge!
(Ad Idamante)
Misero tu? che dici?
ti son conte le tue sventure appien?
IDAMANTE
Dell’amor mio, cielo! il più caro
oggetto, in quelli abissi spinto giace
l’eroe Idomeneo estinto. Ma tu sospiri,
e piangi? t’è noto Idomeneo?
IDOMENEO
Uom più di questo deplorabil non v’è,
non v’è chi plachi il fato suo austero.
IDAMANTE
Che favelli?
vive egli ancor?
(Da sè)
Oh Dei! torno a sperar.
(Ad Idomeneo)
Ah dimmi amico, dimmi, dov’è,
dove quel dolce aspetto vita mi
renderà?
IDOMENEO
Ma d’onde nasce questa, che per lui
nutri tenerezza d’amor?
IDAMANTE
(con enfasi)
Ah, ch’egli è il padre…
IDOMENEO
(interrompendolo impaziente)
Oh Dio! Parla:
di chi è egli il padre?
IDAMANTE
(con voce fiacca)
È il padre mio!
IDOMENEO
(Da sè)
Spietatissimi Dei!
IDAMANTE
Meco compiangi del padre
mio il destin?
IDOMENEO
(dolente)
Ah figlio!…
IDAMANTE
(tutto giulivo)
Ah padre!… ah Numi! dove son io? …
oh qual trasporto! … Soffri, genitor
adorato, che al tuo seno…
(vuole abbracciarlo)
e che un amplesso…
(il padre si ritira turbato)
ahimè! perché ti sdegni?
disperato mi fuggi? …
ah dove, ah dove?
IDOMENEO
Non mi seguir, te’l vieto: meglio per
te saria il non avermi veduto or qui;
paventa, paventa il rivedermi!
(parte in fretta)
IDAMANTE
Ah qual gelido orror m’ingombra i sensi!
… lo vedo appena, il riconosco, e a miei
teneri accenti in un balen s’invola.
Misero! in che l’offesi, e come mai quel
sdegno io meritai, quelle minacce? …
vuo’ seguirlo e veder, oh sorte dura!
qual mi sovrasti ancor più rea sventura.
No.7 Aria
IDAMANTE
Il padre adorato
Ritrovo, e lo perdo.
Mi fugge sdegnato
Fremendo d’orror.
Morire credei
Di gioia e d’amore;
Or, barbari Dei!
M’uccide il dolor.
Traducción
IDOMENEO
Veré, en torno a mí,
la sombra doliente,
que, noche y día:
¡Soy inocente!
me gritará.
En el traspasado pecho,
en el cuerpo exangüe,
mi delito,
la sangre derramada
me señalará
¡Qué miedo!
¡Qué dolor!
De tormento,
este corazón,
¡cuántas veces morirá…!
(Ve aproximarse a un hombre)
Recitativo
IDOMENEO
¡Cielos! ¿Qué estoy viendo! ¡La
desventurada víctima, ay, se acerca!
¿y, estas manos, su verdugo serán?
¡Execrables manos! ¡bárbaros,
injustos Dioses! ¡Nefandos altares!
Escena 10
Recitativo
IDAMANTE
Solitarias playas, acantilados rocosos,
sed testigos de mi dolor, consuelo
y cobijo de mi corazón agitado…
¡cuanto se parece mi cruel suerte a
vuestra dureza! Veo en la bahía, ende
aquellos restos de naufragadas naves,
a un guerrero desconocido. Quiero
escucharlo, consolarlo y, transformar
en alegría, la angustia suya.
(Se acerca y habla a Idomeneo)
Aparta tu temor, ¡oh guerrero!,
quienquiera que seas; ante ti tienes,
a quien puede ayudarte.
IDOMENEO
(Para sí)
Cuanto más lo miro,
más me consumo de dolor.
(A Idamante)
Estaré en deuda contigo por siempre…
¿cómo puedo recompensarte?
IDAMANTE
Mi corazón se siente pagado con
haberte salvado. Amigo mío, mis
penas me han enseñado a comprender
las desgracias de otros.
IDOMENEO
(Para sí)
¡Esa voz!
¡Esa compasión me parte el corazón!
(A Idamante)
¿Infeliz tú? Qué estás diciendo
¡Es acaso tanta tu desventura?
IDAMANTE
El más querido objeto de mi amor,
en esos abismos yace. Ha muerto el
héroe Idomeneo. Mas, ¿tú suspiras y
lloras? ¿Conocías acaso a Idomeneo?
IDOMENEO
Hombre más desgraciado no existe;
no hay quien pueda aplacar su sino.
IDAMANTE
¿Qué estás diciendo?
Él… ¿aún está vivo?
(Para si)
¡Oh Dioses! ¡Recobro la esperanza!
(A Idomeneo)
Dime, amigo; dime, ¿dónde está?
¿Dónde, ese dulce semblante, me
devolverá la vida?
IDOMENEO
Mas, ¿de dónde te nace el amor
que por él alimentas?
IDAMANTE
(Con énfasis)
¡Ah…! Él es el padre…
IDOMENEO
(Interrumpiéndolo, impaciente)
¡Oh Dios! ¡Habla!
¿De quién es el padre?
IDAMANTE
(Con la voz quebrada)
¡Es mi padre!
IDOMENEO
(Para si)
¡Despiadadísimos Dioses!
IDAMANTE
¿Conmigo compartes el llanto por
el destino de mi padre?
IDOMENEO
(Doliente)
¡Ah, hijo…!
IDAMANTE
(Muy alegre)
¡Ah padre…! ¡Ah Dioses! ¿Dónde
estoy…? ¡Oh, qué placer…! Adorado
padre, permite que a tu pecho…
(Quiere abrazarlo)
me abrace…
(El padre se aparta, turbado)
¡Ay de mi! ¿Por qué me rechazas?
¿Desesperado, huyes de mi?
¡Ah! ¿Dónde? ¿Dónde?
IDOMENEO
No me sigas; te lo prohíbo. Más te
valdría no haberme visto aquí.
¡Teme, teme volverme a ver!
(Apresuradamente, se va)
IDAMANTE
¡Ah! ¡Qué gélido horror aturde mis
sentidos! Lo veo, apenas lo reconozco
y, al cariño de mis palabras, huye.
¡Infeliz! ¿En qué le ofendí? ¿Cómo
es que he merecido este desprecio?
Quiero seguirlo, y ver ¡oh suerte!,
qué cruel destino me reservas
Nº. 7 Aria
IDAMANTE
El padre adorado
encuentro de nuevo, y lo pierdo.
Me huye, desdeñoso,
estremeciéndose de horror.
Morir, creía
de alegría y de amor…
¡Oh, bárbaros Dioses!
¡Me mata el dolor!
Hey there, You have done an incredible job. I will certainly digg it and personally suggest to my friends. I’m sure they will be benefited from this web site.