Il barbiere di Siviglia: La calunnia. Versiones

VARIAS VERSIONES DEL ARIA «LA CALUNNIA È UN VENTICELLO» DE LA ÓPERA IL BARBIERE DI SIVIGLIA DE ROSSINI

En la ópera de Gioacchino Rossini, Il barbiere di Siviglia, los principales personajes tienen todos un aria al menos de lucimiento. Esta de hoy, La calunnia è un venticello (La calumnia es un vientecillo), es el aria de don Basilio, papel para bajo, y se encuentra en el acto I.

Don Basilio, es un viejo sacerdotre y además profesor de música de Rosina. Don Basilio llega a casa de la joven, pupila del doctor Bartolo, con la noticia de que el conde de Almaviva se encuentra en Sevilla. Como el trabajo de don Basilio es conseguir que la joven acepte casarse con el doctor Bartolo, decide que lo mejor para alejar cualquier acercamiento a Rosina por parte de Almaviva, es propagar una calumnia sobre él, despues de lo cual su fama quedará tan dañada que no tendrá ninguna posibilidad de que Rosina lo acepte.

El texto no tiene desperdicio:

La calumnia es un vientecillo,
es un aura muy gentil,
que insensible, sutil,
con ligereza, suavemente,
empieza,
empieza a murmurar.
Poco a poco, a ras de suelo,
en voz baja, sibilando
va corriendo, va zumbando,
va corriendo, va zumbando;
y en el oído de la gente
se introduce
se introduce hábilmente
y a las cabezas y cerebros,
y a las cabezas y cerebros
aturde, aturde e hincha.
Una vez fuera de la boca
el alboroto va creciendo,
gana fuerza poco a poco
y vuela de un lugar a otro;
parece el trueno, la tempestad
que en medio de los bosques
va silbando
y atronando y nos hiela de horror.
Al fin se desborda y estalla,
se propaga y se redobla
y produce una explosión,
como un disparo de cañón,
como un disparo de cañón.
Un terremoto, un temporal,
que hace temblar el aire.
Y el infeliz calumniado,
envilecido, aplastado,
bajo el azote público podrá
considerarse afortunado si muere.
Y el infeliz calumniado,
envilecido, aplastado,
bajo el azote público podrá
considerarse afortunado si muere.
¿Qué os parece?

Y el infeliz calumniado,
envilecido, aplastado,
bajo el azote público podrá
considerarse afortunado si muere.
Y el infeliz calumniado,
envilecido, aplastado,
bajo el azote público podrá
considerarse afortunado si muere.
¿Qué os parece?

En esta aria, Rossini hace gala de todo su ingenio. La orquestación va de la mano del texto en todo momento. Empieza como un murmullo, y va creciendo con un importante crescendo, donde cada vez se incorporan más instrumentos. La orquesta crece en intensidad hasta lugares cada vez más altos, hasta llegar al golpe de cañón del bombo.

El bajo que interprete a don Basilio ha de tener una tesitura amplia y también una gran presencia escénica.

Veamos estas versiones de La calunnia è un venticello

Robert LLoyd