BERGONZI & FISCHER DIESKAU: Dúos célebres de Verdi (I VESPRI SICILIANI, VERDI)
De vez en cuando conviene revisar la discografía y encontrar joyas como esta que traemos, donde hay uno de los dúos célebres de Verdi.
Y lo hemos encontrado en: Famous Duets (Dúos célebres) con Carlo Bergonzi y Dietrich Fischer-Dieskau, con la Bavarian Radio Symphony Orchestra bajo la dirección de Jesús López Cobos.
Famous Duets (Dúos célebres
)
Además los oiremos cantando el dúo Sogno, o son desto del acto III de I vespri siciliani de Giuseppe Verdi, uno de esos grandes dúos célebres de Verdi entre tenor y barítono. Destacamos que el rol de Montforte, es uno de los grandes roles para barítono que compusiera Verdi.
Volviendo a este disco, publicado en 1993, merece la pena dedicarle unas líneas y desde luego escucharlo completo a la que se tenga una oportunidad. En él encontramos una magnífica selección de dúos célebres en la ópera.
1. La forza del destino: Solenne in quest’ora
2. La forza del destino: Ivano Alvaro
3. La Gioconda: Enzo Grimaldo, Principe di Santafior
4. Otello: Talor vedeste in mano
5. I vespi Siciliani: Sogno, o son desto
6. Les pecheurs de perles: Au fond du temple saint
7. La Boheme: Che penna infame!
8. Don Carlos: E lui! L’Infante!
Y ahora dejamos la traducción de esta gran escena de I vespri siciliani, donde Arrigo (Carlo Bergonzi) se entera de que Montforte (Dietrich Fischer-Dieskau) es su padre.
Dúos célebres de Verdi: I vespri siciliani
ARRIGO
(Leyendo el papel)
¡Qué alegría! ¿Será verdad?
¿Sueño o estoy despierto?
¡Una carta de mi madre,
aquí, sobre mi corazón!
¡Oh, cielos! ¿Qué descubro?
Un secreto funesto se me revela.
¡Tiemblo de horror!
Un secreto funesto, etc.
MONFORTE
Mientras contemplo
ese rostro amado
aunque lleno de dolor,
mi alma se llena de dicha
pues puedo volver a decir:
¡He aquí a mi hijo!
¡Vuelvo a ser padre!
Pero ¿qué te sucede?
¿Rehúyes mi mirada, oh hijo?
ARRIGO
¡Estoy horrorizado!
MONFORTE
¿No sabes entonces quien soy yo?
ARRIGO
(para sí)
¡Oh mujer, te he perdido!
MONFORTE
¿Desconoces mi poder,
Arrigo?
¡Soy Monforte!
ARRIGO
(para sí)
¡Oh mujer!
¡La he perdido!
MONFORTE
Gracias a mi poder
y sólo con que lo indiques,
te será concedido
cuanto pidas y esperes.
¡Títulos, honores,
riquezas, bienes,
todo lo que ambiciones
yo te lo daré!
ARRIGO
Abandóname a mi suerte,
déjame y ¡seré feliz!
MONFORTE
Pero ¿no sabes
qué espléndida fama
tengo?
Mi nombre es glorioso.
ARRIGO
¡Tu nombre es execrable!
MONFORTE
¡Palabra fatal!
¡Insulto mortal!
¡Se ha desvanecido el gozo
que mi alma esperó!
¡Justicia suprema!
¡Tremendo anatema alcanza
a un cruel hijo
que reniega del padre!
ARRIGO
¡Ah devuélveme, oh destino,
a mi oscuro estado!
¡Se ha desvanecido la esperanza
que mi alma sonó!
¡Justicia suprema!
¡Tremendo anatema
la que cae sobre un hijo
que a su padre imprecó!
MONFORTE
¡Detente, Arrigo!
ARRIGO
¡Ah, déjame!
MONFORTE
¡Detente, Arrigo!
ARRIGO
¡Ah, déjame, oh cruel,
con mi dolor!
MONFORTE
¡Dulcifica tu cruel corazón!
¡En vano, oh hijo,
cruel me llamas!
¡Que te venza el dolor
de tu padre!
ARRIGO
¡Déjame huir
si es verdad que me amas!
¡Déjame marchar
a otro país,
a otro suelo!
¡Sí, déjame huir!
MONFORTE
¡Ah hijo, en vano, etc.
ARRIGO
¡Ah, arrojarme en tu pecho quisiera,
pero no puedo!
MONFORTE
¿Qué te lo impide, ingrato?
ARRIGO
¡El espectro de mi madre
se interpone entre nosotros!
Fuiste su verdugo…
MONFORTE
¡Oh, hijo mío!
ARRIGO
… y mi alma sería culpable
si vacilara entre ella y tú.
¡Me avergüenzo de que
mi corazón dude!
MONFORTE
¡Ah, hijo mío! ¡Hijo mío!
ARRIGO
Sombra amada,
que en el cielo reposas,
devuélveme la fuerza
que mi corazón perdió.
Que sobre mí
tu mirada vele piadosa,
y ruega ¡oh madre!
ruega por mí. Etc.
MONFORTE
El ardiente ruego de tu padre
¿no es nada, Arrigo,
no es nada para ti?
Abre tu pecho
a un santo amor,
¡Entrégate, oh hijo,
a mí! Etc.