Il Trovatore

Verdi Il Trovatore Cura Hovorostovsky Villarroel Naef Rizzi Covent Garden 2002

Il Trovatore es una ópera de Giuseppe Verdi, con libreto de Salvatore Cammarano, aunque Leone E. Bardare la completó. Está basado en el drama castellano “El Trovador” de Antonio García Gutiérrez. La ópera fue estrenada en Roma el 19 de enero de 1853. En España, se estrenó en el Teatro Real de Madrid un año más tarde.

Temática y simbolismo de Il Trovatore

La música de Il Trovatore refleja de manera magistral la complejidad emocional de los personajes. Entrelaza sentimientos de venganza y obsesión que se plasman en el deseo de venganza de Azucena como motor de gran parte de la trama. El amor y sacrificio que caracterizan la relación entre Manrico y Leonora, así como la compleja relación entre Azucena y Manrico, y el trágico destino de los hermanos separados.

Verdi consideraba a Azucena como el personaje principal, llegando a cuestionarse hasta el nombre de la ópera. Il trovatore, Rigoletto y La traviata forman la llamada «trilogía popular» de Verdi. La ópera es reconocida por su brillantez y su exigencia vocal, su intensidad dramática, si bien ha sido criticada a veces por su trama melodramática.

ARGUMENTO DE IL TROVATORE

El texto sitúa la acción entre los años 1412 a 1416.

Acto I

Escena primera.

Cuarto de la guardia del palacio de Luna (palacio de la Aljafería, Zaragoza, España). Ferrando, capitán de los guardias, les ordena que estén atentos mientras el Conde de Luna vaga sin cesar bajo la ventana de Leonora, dama de honor de la Princesa de Aragón, a quien ama. El Conde siente celos de su rival, el trovador Manrico. Para mantener despiertos a los guardias, Ferrando narra la historia del conde. Según la historia, una gitana de aspecto terrible embrujó al pequeño hermano del conde, haciéndolo débil y enfermizo, y por ello fue condenada a la hoguera. En el momento de su muerte, la gitana ordenó a su hija Azucena que la vengara, lo cual hizo en parte raptando al hijo menor del Conde. Aunque los huesos incinerados de un niño fueron encontrados en las cenizas de una hoguera, el padre rehusaba creer que eran los de su hijo. En su lecho de muerte, hizo jurar al Conde de Luna (su hijo mayor) que encontrara a su hermano.

Escena segunda.

Jardín en el palacio de la princesa. Leonora confiesa su amor por Manrico a su confidente, Inés. Cuando salen de escena, el Conde de Luna escucha la voz de su rival, Leonora regresa y confunde al Conde con su amante, pero cuando Manrico entra en el jardín, Leonora corre a sus brazos. El conde reconoce en Manrico a su rival, y le reta a pelear. Leonora trata de intervenir, pero no puede detenerlos. Manrico derrota al Conde, pero decide no darle muerte.

Acto II

Escena primera.

Campo de gitanos. Los gitanos entonan una canción. Manrico está echado al lado de su madre, Azucena, convaleciente por las serias heridas sufridas en el campo de batalla, mientras ésta canta una canción funesta que narra sus deseos de venganza. Mientras los gitanos levantan el campamento, Azucena le confiesa a Manrico que cuando intentó quemar al hijo del conde, por equivocación tiró a las llamas a su propio hijo. Manrico, entonces entiende que él es el hijo del Conde, y que por ello cuando luchó con su hermano y tuvo la oportunidad de matarlo, sintió una fuerza sobrenatural que le impidió hacerlo. Llega un mensajero diciendo que Leonora, que cree a Manrico muerto, está por entrar a un convento. Manrico intentará impedirlo, lanzándose en su búsqueda, pese a la oposición de Azucena y a su precario estado de salud.

Escena segunda.

Frente al convento. El Conde de Luna y sus hombres intentan raptar a Leonora. Ella y algunas monjas entran en procesión, en el momento en que Luna intenta actuar, Manrico se interpone entre ellos, y ayudado por sus hombres escapa llevándose a Leonora consigo.

Acto III

Escena primera.

El campamento del Conde de Luna. Azucena ha sido detenida y la llevan ante el Conde, siendo reconocida por Ferrando como la gitana que raptó al hijo del Conde (hermano del Conde de Luna). También se da a conocer como la madre de Manrico, razón por la cual el Conde de Luna encontró doble motivo para condenarla a morir en la hoguera.

Escena segunda.

Cámara en el castillo que ha sido tomado por Manrico. Leonora y Manrico viven el uno para el otro. Ruiz, hombre de Manrico, le informa que su madre será conducida a la hoguera. Manrico marcha para rescatarla (entona el aria «Di quella pira»). Leonora cae desmayada.

Acto IV

Escena primera.

Frente a una celda en el castillo. Leonora intenta liberar a Manrico, que ha sido capturado por el Conde de Luna. Leonora implora piedad al Conde y ofrece su vida a cambio de la de Manrico. Promete entregarse al Conde. El Conde acepta y Leonora, sin que él se dé cuenta, ingiere un veneno que actuará antes de que se consume la boda.

Escena segunda.

En la celda. Manrico y Azucena esperan su ejecución. Manrico intenta calmar a su madre, quien no puede conciliar el sueño. La gitana finalmente se duerme, esperanzada en el retorno a las apacibles montañas. Leonora llega para decirle a Manrico que está a salvo, pero él rechaza dejar la prisión, cuando se entera de que Leonora no le podrá acompañar. Creyéndose engañado, descubre que ella ha bebido el veneno para mantenerse fiel a él. Leonora agoniza en brazos de Manrico. El Conde de Luna entra y al ver a su prometida muerta en brazos de su rival, ordena la ejecución de Manrico. Mientras se cumple la sentencia, Azucena despierta junto al Conde y éste le señala el instante preciso en que Manrico es ejecutado, pero ella en vez de lamentarse grita extasiada la verdad «él era tu hermano, te he vengado madre», mientras el Conde, al oír tal revelación, termina gritando de horror.

Arias y momentos musicales destacados

las principales arias de Il Trovatore y el coro más destacado son:

  • «Tacea la notte placida»: Aria de Leonora que muestra su amor por Manrico.
  • «Di quella pira»: Famosa aria de Manrico, conocida por sus exigentes notas agudas.
  • «Stride la vampa»: Dramática aria de Azucena que evoca la muerte de su madre.
  • «Il balen del suo sorriso»: Aria del Conde di Luna, ejemplo de bel canto verdiano.
  • «Coro de los gitanos» (Anvil Chorus): Uno de los coros más conocidos de la ópera

Producciones de Il Trovatore

En esta web puedes ver al menos cuatro producciones destacadas de Il Trovatore, consultando los artículos relacionados y en este insertamos la siguiente:

IL TROVATORE (G. VERDI)

Manrico: Jose Cura
Conde de Luna: Dmitri Hvorostovsky
Azucena: Yvonne Naef
Leonora: Veronica Villarroel

The Royal Opera Chorus
Orchestra of the Royal Opera House
Director musical: Carlo Rizzi
Dir.: Brian Large, Elijah Moshinsky
Covent Garden, ROH (2002)

Veamos un fragmento de esta producción de Il Trovatore con José Cura, Dmtri Hvorovstosky y Verónica Villarroel

 

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