En la tercera parte de la saga El Padrino, del director Francis Ford Coppola, se puede ver una de las escenas más impactantes de toda la trilogía, lo cual ya es un mérito, puesto que hay muchas y muy buenas.
La escena a la que nos referimos es la última del film y por lo tanto de la serie. Michel Corleone (Al Pacino) se encuentra en Sicilia, más concretamente en la Casa de la Ópera de Sicilia, en Palermo, donde ha acudido para presenciar el debut de su hijo Anthony como cantante de ópera. No vamos a detallar todo el argumento, pero en esa escena hay un asesino a sueldo que tiene como propósito asesinar a Michael Corleone.
Allí se encuentran también la madre de sus hijos, y su hija Mary. Don Corleone ha prohibido a su sobrino Vincent Corleone que continúe con sus relaciones amorosas con su hija, si quiere ser el nuevo Don. Cuando Mary se ve rechazada por él, va a encontrarse con su padre para pedir explicaciones y allí en las escaleras del teatro, el asesino contratado para asesinar a Michael, dispara, pero su tiro no da en el blanco: Michael apenas sufre un rasguño, pero Mary recibe un tiro en el pecho que la mata instantaneamente.
Como música de fondo suena el maravilloso Intermezzo de la ópera de Mascagni, Cavaleria rusticana. Esta es la ópera que se representaba esa noche en el teatro.Y esa música es la que acompaña uno de los momentos interpretatvos mejores en la carrera de Al Pacino: su grito silencioso, transido por el dolor de ver a su hija muerta.
En el film se oye como alguien grita Hanno ammazzato la figlia Maria!, al igual que al final de la ópera Cavalleria rusticana se oye decir Hanno ammazzato Turiddu!.
Las últimas imagenes son las de un anciano Michael Corleone, en su casa de Sicilia, donde muere por causas naturales.
Toda la saga la he visto innumerables veces. Este final tan terrible, un padre desesperado porque lo han castigado en lo que más duele, la maravilla de ópera que es Cavalleria, todo este espacio que Vds. nos brindan, es un bálsamo para mí – aunque acabe la velada llorando por las emociones. La expresión de Pacino sobrepasa los límites de la interpretación actoral. Insuperable. Gracias!
Gracias a ti por cometar. Es una gran saga, y ésta una gran escena, con una música incomparable.
Esa OPERA!!!
Siempre, siempre lloro…
Ahora que he perdido a un Hermano de Sentimiento mas…
Hasta siempre RENE….
Sentimos tu pérdida. La música, la buena música siempre nos debe llegar al corazón. Unas veces será para reir, sonreir y, porque no, llorar.
Lo que me gustaría saber es quien canta oh Lola del personaje Antony