NABUCCO ACTO IV – ARGUMENTO
Nabucco reconoce sus muchos errores, y oye como su hija Fenena es conducida al patíbulo. Entonces pide ayuda al Dios de los israelitas. Lleno de una fuerza prodigiosa logra forzar su salida del calabozo. Su fiel Abdallo le trae su espada, y con unos cuantos que aún le son fieles, sale a defender la vida de su hija y la de todos los judíos.
Abigaille moribunda por efectos de un veneno, pide perdón a su padre y a su hermana. Muere invocando al Dios de Israel.
De este acto IV vamos a escuchar el recitativo, aria y cabaletta Son pur queste…Dio di guida…cadran, cadranno i perfidi, que interpreta el barítono Ettore Bastianini, en una producción del Teatro Comunale de Florencia (1961). Dirige Bruno Bartoletti.